El mercado del hábitat y diseño en México, una oportunidad de negocio para el 'made in Spain'

Cancun_Shoreline_Mexico

La Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en México D.F ha elaborado un informe en el que se constatan las oportunidades de negocio que supone el mercado del hábitat y el diseño en este país para las empresas españolas.  El mercado del hábitat y el diseño en México se encuentra en fase de desarrollo, con una industria nacional que se está adaptando a las nuevas tendencias e interesantes oportunidades para los actores internacionales tanto en el canal contract como en el mueble hogar.

El presente trabajo se ha centrado en analizar aquellos productos relacionados con el hábitat que cuentan con un componente de diseño, lo cual debe ser tenido en cuenta a la hora de estudiar las estadísticas de comercio exterior, ya que estas no tienen en cuenta el citado criterio cuando clasifican los productos. De este modo, en lo que a mueble de diseño se refiere, la oferta local mexicana se caracteriza por una separación entre el mundo del diseño y la producción a nivel industrial, de manera que son pocas las empresas que producen mueble de diseño en grandes volúmenes (Grupo Riviera, Alfonso Marina entre otras).

La mayoría de empresas que fabrican mueble en México son de tamaño pequeño (solamente 163 superan los 100 trabajadores) y su producto está dirigido, principalmente, a los segmentos de poder adquisitivo medio y bajo, dado que la mayoría de la población se encuentra ubicada en esos nichos de ingresos. No obstante, existe una clase media incipiente y, sobre todo, un nicho de mercado de consumidores de alto poder adquisitivo muy interesante que pueden tener acceso a los productos objeto de estudio, por lo que existen posibilidades en este target para las firmas de importación.

En este sentido, hay que destacar que los principales competidores internacionales que se van a encontrar las empresas españolas en México proceden fundamentalmente de Estados Unidos y de Europa (Italia, Alemania y Países Nórdicos). La competencia estadounidense es más fuerte en el mobiliario para oficinas y colectividades, con empresas que poseen instalaciones productivas en México y que están en condiciones de ofrecer precios muy competitivos, dominando así el mercado. En el caso del mueble de diseño destinado al hogar, si bien existen empresas norteamericanas muy bien posicionadas, la competencia es más abierta y el diseño europeo es muy valorado, existiendo marcas europeas con una
gran trayectoria en el mercado.

zocalo2

Independientemente del país de procedencia y del tipo de producto que fabriquen, todas las empresas internacionales del sector que han logrado ventas en México de manera constante tienen en común el hecho de contar con cierta estructura física en el país; ya sea un representante de la propia empresa, un importador mexicano, o bien, la presencia en algún show-room de tienda de diseño que incluya (todos prácticamente lo hacen) un estudio de diseño asociado para proyectos.

Oportunidades para el canal contract

Las empresas que apuesten fuerte por el mercado mexicano y cuenten con la citada estructura, además de una propuesta de valor clara y vocación de permanencia, podrán aprovecharse mejor de las oportunidades que existen en México, especialmente las relacionadas con el canal contract. Dentro de este canal, existen posibilidades de negocio en proyectos de construcción de nuevos edificios corporativos, centros comerciales y hoteles.

Así, en el caso de los grandes edificios corporativos, hay que destacar que en el Paseo de la Reforma de la Ciudad de México existen proyectos en cartera para el año 2015 y posteriores, entre los que destacan: un desarrollo de usos mixtos de Grupo Kaluz, una torre de departamentos en el University Club, Torre Cuarzo, además de encontrarse en proceso otras torres como el edificio de BBVA Bancomer, Torre Reforma y Torre Diana.

También representa una gran ocasión la construcción de nuevos centros comerciales, estando planeada la construcción de 200 en todo el país para la próxima década, lo que supondrá una inversión de hasta 19.500 millones de dólares.
Por último, constituye otra importante oportunidad de negocio la inversión planeada para los próximos dos años de 11 mil 394 millones de dólares en alrededor de 200 proyectos hoteleros, de infraestructura y transporte.

Para poder acceder a este tipo de proyectos en México es imprescindible tener en cuenta que en la toma de decisiones intervienen tres actores fundamentales (prescriptores), que son: el estudio de arquitectos, el cliente final o desarrollador y la empresa constructora.  En el caso de los edificios corporativos el que mayor poder de decisión tiene es el estudio de arquitectos, con el que hay que llevar a cabo un exhaustivo seguimiento comercial, aunque no hay que perder de vista al cliente final y a la empresa constructora, que, en ocasiones, también pueden tener poder de decisión.

Por otro lado, en los proyectos de centros comerciales, el actor que más influencia tiene en las decisiones de compras de mobiliario es el constructor, mientras que en los proyectos hoteleros se suelen tomar las decisiones desde la matriz de la cadena hotelera, con la que hay que establecer la relación comercial, sin perder de vista a los constructores y decoradores.

El consumidor más del gusto del diseño

En relación con el consumidor final del mueble hogar de diseño en México, está limitado, tanto por su capacidad adquisitiva como por su gusto. Así, sigue existiendo un consumidor mexicano de renta alta que valora un mueble voluminoso, sólido y duradero frente a otras características como el diseño, pero al mismo tiempo comienzan a ser mayoría los consumidores que dentro de este nivel de renta valoran el diseño por encima de otros factores.

Para acceder a ambos tipos de consumidores, las marcas internacionales asentadas en México han optado fundamentalmente por tres tipos de canales de distribución: cadenas departamentales, tiendas multimarca y tiendas propias. También hay que subrayar la existencia de centros de diseño en los que tienen cabida showrooms de distintas firmas nacionales e internacionales y que representan perfectamente el nicho al que se dirige el producto español y no solo podría servir como escaparate de España en el país, sino que también es una muestra del producto mexicano y el resto de la competencia extranjera del sector del mueble de diseño, la decoración y el hábitat.

Los importadores – distribuidores generalmente aplican unos márgenes mayores que los del mercado europeo, por lo que los precios también son más elevados. No obstante, siempre se tiene como referencia el nivel de precios de Estados Unidos, del que no pueden alejarse demasiado, ya que el consumidor mexicano de mueble de diseño con alto poder adquisitivo tiene la posibilidad de comprar en este país y, por tanto, es conocedor de los precios.

En cuanto a la percepción que se tiene en México del mueble de diseño español, se identifica como un producto de calidad alta y diseño interesante, tanto por parte de los prescriptores, como del consumidor final. Este aspecto ha ayudado a que existan empresas españolas consolidadas en el mercado mexicano del hábitat y el diseño, aunque muchas de las que han intentado entrar en el país han caído en el error de no implicarse de manera directa en el mercado mexicano, recurriendo de forma generalizada a representantes, distribuidores, o ventas puntuales.

De esta forma, han intentado reducir el riesgo y los costes, pero también han perdido el control en la distribución del producto, así como en el posicionamiento y promoción del mismo, lo cual no ha ayudado a crear una imagen consolidada del mueble y el diseño español.

Por tanto, se puede concluir que, a pesar de que el segmento de mercado al que se dirige el mueble de diseño es limitado, el auge del sector de la construcción, los nuevos proyectos de desarrollo de edificios corporativos, centros comerciales y hoteles, ofrecen oportunidades muy interesantes para las empresas que se encuentren posicionadas en el mercado con show – rooms o tiendas donde sus productos resulten visibles, tanto para prescriptores, como para clientes finales